lunes, 2 de noviembre de 2009

Propuestas metodológicas y didácticas para una pedagogía Libertaria

Primero debemos declarar que nuestra posición se aleja completamente de lo que la corriente insurgente podría definir “educación popular”, esto debe ser bastante claro para que no surjan inconvenientes. Entendemos una educación popular, como la organización del “pueblo”, para la búsqueda de herramientas que reivindiquen la lucha de clases, que cuestionen el sistema político imperante, y promuevan un “adoctrinamiento” dirigido al uso del poder para generar un gobierno socialista. Una forma de organización.
La educación libertaria que promovemos y defendemos, es nuestra visión de la vida en su totalidad, es la organización de todos, para la construcción autogestionada de herramientas y métodos que promuevan la superación de la sociedad de clases, – sin alejar de nuestra mira el enfrentamiento entre nosotros, los explotados, contra nuestros enemigos, los explotadores-, cuestionamos el sistema político en su totalidad, y promovemos la “pasión destructiva que también es una pasión constructiva”, como decía Bakunin, basada en la destrucción también del poder, y de cualquier gobierno que intente imponer una manera de ver la realidad. Una pedagogía libertaria, es aquella que responde, se piensa y realiza a través de acciones libertarias, intencionales y efectuadas en la libertad de los individuos que participan en ella. Una forma de organización con ciertos valores, de libertad, horizontalidad, solidaridad y autogestión.




Definición metodología y didáctica
Podríamos definir una metodología como la forma por la cual buscamos llevar a cabo un plan de acción, o sea, el o los métodos que estimemos convenientes para conseguir objetivos, tanto a largo plazo como en el mediano y corto. Recalquemos de cualquier manera que esta metodología puede –y debe- ir variando según distintos factores que vayan influyendo en el proceso, tanto educativo como en el social que intentamos cambiar.
La didáctica, tiene su definición en los elementos y las formas particulares que nos conducen a “explicar” nuestra postura frente a los distintos temas que intentaremos abordar en el proceso educativo.
Propuesta libertaria
Nuestra propuesta pasa por una mezcla indiscriminada de teorías ya promulgadas como, “la pedagogía de la Autonomía”, de freire, la propuesta –aunque tomada fuertemente por la burguesía- Montessori, por su acción inmediata con la libertad, las propuestas Holísticas de educación, por ejemplo, y conductas que tomamos y realizamos como anarquistas, el boicot, la solidaridad, el apoyo mutuo, la autogestión, el compromiso, etc.
El colegio, desde el boikot a la nueva educación.
Desde el comienzo de la historia el hombre a usado la educación como desarrollo de la relación humana dirigida hacia la supervivencia del ser humano y su mejoramiento en su condición de vida. Al pasar el tiempo la educación a sido institucionalizada y llevada a la adaptación del ser humano hacia el sistema social imperante, en nuestra actualidad, el capitalismo.
Acá tenemos un gran problema que asumir a la hora de proponer nuevas formas de educación o inclusive proponer la destrucción de la escuela, ¿qué pasaría con los conocimientos científicos, con materias denominadas “duras”?, es en base a esto que declaramos nuestra propuesta ligada a un boikot del sistema actual, al uso de ciertas herramientas y procesos necesarios para promover la pedagogía libertaria. Un reordenamiento del proceso y de las relaciones humanas creadas, horizontalidad, entre profesores y estudiantes, respeto por la diversidad de realidades y cuestionamiento de la vida, de las supuestas teorías, etc
Aplicabilidad en la educación y toda la realidad.
“Nuestra misión es destruir, no construir: otros hombres construirán, otros mejores que nosotros, más inteligentes y más libres”. Hablar de educación, en su proyecto, en su teorización, es hablar casi siempre de cómo financiarla, de que leyes son beneficiosas y cuales no, de que los espacios no son aptos para el proceso, de la violencia de los estudiantes para con sus profesores, de la falta de recursos, etc.
Pero debemos comprender que nuestra posición es contraria en esencia a todo lo que pueda significar la institución Estatal, sabemos que la educación en todos sus áreas es un derecho intransable, que al ser público debiese ser gratuito, pero no debemos conformarnos con solo “pedir” que llegue una superación de esta. Debemos actuar, debemos generar las condiciones que nos llevarán a la destrucción masiva de lo que entendemos como educación normal, tanto sus colegios vistos como cárceles, a las jerarquías profesor-alumno.
Así es como creemos que debemos “estrujar” nuestras herramientas, y tal como planteaba Bakunin, hacer de la libertad más que una condición una meta, o sea, que ella sólo se consigue con la lucha. Hacer de la educación que queremos una acción conducente a la libertad.
El juego y la interacción humana profesor-estudiante.
El proceso educativo en sí, debe ir tanto ligado a la realidad, en las necesidades sociales, como en las posibilidades propias de los individuos para resolver en conjunto con la comunidad los problemas que nos aquejan. Así también, promover la producción de conocimiento y el cuestionamiento totalitario, la socialización de la intelectualidad, para hacerla una arma más contra la explotación, y esto está ligado con el incentivo y el interés, dos conceptos que se pueden llegar a convertir en esenciales para el proceso. El juego entendido como la relación humana desligada de la obligatoriedad, donde los valores y el aprendizaje se ligue a la destrucción del ordenamiento hegemónico del profesor, como representante de la verdad, o sea, que el profesor pase también a jugar, a aprender de las individualidades de todos los que participan en el proceso.
El uso de la libertad, aprender haciendo
hacer de la libertad una herramienta real y fuerte para las construcción de teorías propias para cada realidad, propia para cada individuo, y necesaria para resolver los problemas inmediatos. Hacer de la praxis, teoría y práctica, una forma real, una metodología más en el proceso, creada desde el proceso mismo, con todos los participantes. No hay maestros, si no interesados en aprender, en construir y revolucionar la realidad, en las prácticas y las ideas.

la democracia directa, y el asambleismo
uno de los conceptos primordiales de este proceso debe estar también afianzado en la organización del grupo, y para esto la asamblea debe responder a los principios básicos de una organización libertaria; horizontalidad, apoyo mutuo, solidaridad, autogestión.
el compromiso y el ejemplo, determinantes en el proceso.

Es de suma importancia el ejemplo como uno de los pilares del proceso, aquel que apoya esta instancia debe hacer de su vida una lucha constante, tanto en responsabilidad como en acción inmediata, la mejor forma de hacer comprender una idea, una propuesta de vida, una propuesta de educación, es a través de la mejor didáctica, el ejemplo.

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